Investigaciones científicas Paper

Biodiversidad en Lima: investigadores encuentran más de 190 especies de insectos en solo cuatro parques de Miraflores

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Especialistas durante trabajos de campo. (Foto: Héctor Aponte)

Estudio buscó caracterizar los grupos de insectos que habitan en áreas verdes limeñas.

Un equipo de investigadores de la Universidad Científica del Sur llevó a cabo un estudio para conocer la presencia y características de los diferentes insectos presentes en cuatro parques de Miraflores, uno de los distritos con mayor cantidad de áreas verdes por persona.

Los parques escogidos para el análisis fueron Naciones Unidas, Francisco de Zela, Reducto N°2, y el parque Ramón Castilla. Su elección estuvo basada en criterios de idoneidad, accesibilidad, protección y seguridad, con el propósito de garantizar que la investigación se realizara en óptimas condiciones.

Los resultados del estudio revelaron la existencia de 191 insectos diferentes, agrupados en 12 familias. De estas, la que contó con mayor presencia fue la familia Diptera (moscas y afines), con 773 individuos en total, seguida por la Lepidóptera (mariposas y polillas), con 338 insectos, y la Hymenoptera (avispas, abejas y hormigas), con 328 integrantes reconocidos.

Además, la similitud de biodiversidad hallada entre los parques fue considerablemente baja, lo que significa que cada uno de estos ecosistemas albergaba un grupo de insectos distinto al de los demás.

De acuerdo con Héctor Aponte, autor del estudio y docente investigador de la Universidad Científica del Sur, este hallazgo se debe pensar desde el punto de vista de un insecto: “Quizás para nosotros, los ambientes son parecidos, pero, a la escala de un insecto, la presencia de algunas especies de árboles que no existen en los demás parques genera un ecosistema completamente distinto”. 

La variabilidad de las especies pudo ser observado desde el punto de vista espacial y temporal, debido a las diferencias estacionales entre la época de verano e invierno.

Aponte comenta que esta diferencia se puede explicar debido a la existencia de mayor flora en los ecosistemas durante el verano, la cual sirve como oferta de alimento para los polinizadores. Por otro lado, el ciclo de vida de la gran mayoría de insectos se completa durante esta estación, como es el caso de las lepidópteras, lo que aumenta su presencia.

El estudio fue publicado en la revista de Biología Tropical de la Universidad de Costa Rica.

¿De qué manera se realizó el estudio?

El grupo de investigadores empleó cuatro métodos de recolecta de insectos en cada una de las temporadas, para poder capturar y, posteriormente, analizar cada uno de los individuos. Así, se utilizaron trampas de caída “pitfall”; una trampa “malaise” al ras del suelo, y una en el dosel de un árbol; así como una trampa de luz, que trabajaba durante la noche.

Cada insecto atrapado fue evaluado rigurosamente en un laboratorio especializado, utilizando bibliografía que ayudó a determinar la clasificación de los mismos. Esta investigación contó con la autorización de la Municipalidad de Miraflores, y con el soporte del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR).

¿Cuál es el rol de la biodiversidad en nuestra cotidianeidad?

Según explica Aponte, una mayor presencia de especies tanto de flora como de fauna beneficia ampliamente a nuestro día a día. El investigador comenta sobre los diferentes servicios ecosistémicos que brindan estos pequeños animales, tales como sostener el ciclo de nutrientes que mantiene el ecosistema, el control de plagas, o la polinización.

Asimismo, también resaltan beneficios como una mayor y mejor captura de carbono, a raíz de una diversidad de especies arbóreas en los ambientes, lo que permite respirar un aire más limpio. Por último, los beneficios educativos como los de poder observar y aprender más sobre estos seres vivos que conviven con la urbe también es parte de su impacto positivo.

En una ciudad en la que, según datos del INEI, por habitante se tienen apenas 3 metros cuadrados de área verde (tres veces menos que el promedio regional), el biólogo menciona que trabajos como este debe dar luz sobre la necesidad de poder reflexionar acerca de las malas prácticas que han tenido las gestiones de otros distritos, en los cuales se han destruido parques enteros, y cómo afecta esto a la propia biodiversidad.

“Es fundamental tomar medidas que permitan mantener esta diversidad, por lo que esperamos que los tomadores de decisiones en las municipalidades puedan utilizar esta información para una mejor gestión de los parques urbanos. Poder entender la biodiversidad que nos rodea nos permite justificar la mantención de los parques en la ciudad”, comenta Aponte.

Investigadores:

Hector Alonso Aponte Ubillus

Contacto de prensa:

+51 962 744 069

ycollave@cientifica.edu.pe

kramirezp@cientifica.edu.pe