El pie diabético es la causa más frecuente de internamiento en este grupo de personas.
Según la Organización Panamericana de la Salud, alrededor de 62 millones de personas viven con diabetes en las Américas. En Perú, esta enfermedad afecta al 8% de la población, de los cuales solo el 35% logra un control adecuado.
La diabetes es una de las principales causas de ceguera, insuficiencia renal, ataques cardíacos, derrames cerebrales y amputación de miembros inferiores, complicaciones que se asocian con el pie diabético, una de las manifestaciones más comunes y peligrosas de esta enfermedad.
Un reciente estudio realizado en Perú halló que el 17% de los pacientes internados por pie diabético sufre una amputación mayor (por encima del tobillo). El estudio se realizó con data de 192 pacientes del Hospital Maria Auxiliadora en Lima, entre los años 2017 y 2019.
La investigación, publicada en la revista Plos One, determinó que, del total, el 80% tenía una infección por pie diabético causada por una bacteria resistente a más de un antibiótico. El 2% del total de internados por pie diabético en este estudio, falleció.
“Nuestro estudio reveló una tasa significativamente alta de bacterias multidrogorresistentes a los antibióticos, muy superior a la de la mayoría de los informes mundiales. […] Dada esta realidad, es fundamental que todos los centros sanitarios establezcan su perfil bacteriológico y de susceptibilidad para las infecciones por pie diabético”, afirman los autores, liderados por el endocrinólogo Marlon Yovera, investigador de la Universidad Científica del Sur.
La situación del pie diabético
Otro estudio, también dirigido por Yovera-Aldana, Perú revela que 1 de cada 5 pacientes hospitalizados por diabetes mellitus en hospitales nacionales presenta pie diabético.
La investigación, publicada en la revista Primary Care Diabetes, también detectó que hay una mayor cantidad de pacientes hospitalizados por pie diabético en la selva y la costa, en comparación con los hospitales de la sierra.
«Perú tiene una carga considerable de enfermedad por pie diabético, especialmente en los hospitales menos equipados de las regiones selváticas y costeras del país», afirman los autores.
La investigación, que incluyó a 8,346 pacientes internados en hospitales nacionales por diabetes, reveló que uno de cada veinte hospitalizados en general presentó pie diabético.
Infección grave
Los autores también identificaron la gravedad de las infecciones en el pie diabético. Del total de internados que ya presentaban sepsis, solo el 36% recibió desbridamiento en las 48 horas siguientes al ingreso; es decir, la mayoría no accedió a tiempo a un procedimiento que puede reducir el riesgo de amputación.
De los pacientes hospitalizados por pie diabético, el 61% presentaban infecciones de moderadas a graves, y el 40% tenían afectación ósea, lo que indica que la mayoría acudió al hospital cuando la infección ya estaba avanzada.
Por ello, los autores del estudio destacan la importancia de que los equipos interdisciplinarios de salud mejoren el tiempo de respuesta para realizar el desbridamiento quirúrgico en los pacientes de mayor riesgo, con el objetivo de evitar amputaciones.
Los pacientes incluidos en el estudio fueron aquellos con más de 72 horas de hospitalización, mayores de 18 años, ingresados en unidades de medicina general, cuidados críticos (cuidados intensivos y cuidados intermedios) y urgencias. Se excluyeron a los internados en salas de gineco-obstetricia y pediatría.
Situación de la diabetes en Perú:
- La diabetes mellitus tipo 2, o del adulto, es difícil de diagnosticar en sus primeras etapas, ya que suele ser en la mayoría asintomática. Sin embargo, hay factores de riesgo que nos permiten una alta sospecha como la obesidad, sedentarismo y aumento de perímetro abdominal.
- Se estima que más del 20% de los peruanos se encuentra en condición de prediabetes, una fase en la que es posible evitar el desarrollo de la enfermedad, según un informe publicado en la Revista de la Asociación Latinoamericana de Diabetes.
- El retraso en el diagnóstico de esta enfermedad ha provocado que muchos pacientes presenten daño ocular, renal o neurológico cuando se les diagnostica por primera vez.