Diego Chambergo-Michilot es estudiante de medicina de la Universidad Científica del Sur (UCSUR) y recientemente ha sido clasificado como investigador nivel II en el Registro Nacional Científico, Tecnológico y de Innovación Tecnológica (Renacyt), convirtiéndose así en el estudiante de pregrado con mejor calificación a la fecha.
Actualmente, Diego se encuentra cursando el internado en la carrera de Medicina mientras desarrolla dos investigaciones más en paralelo. Tiene 23 años.
Inicios en la investigación
El principio de la relación de Diego con la investigación se remonta a su tercer ciclo de carrera. Antes de eso, era un tema que veía muy lejano, casi imposible. Tras asistir a charlas sobre el tema, ya no lo sintió tan lejano.
“Después de varias charlas, me animé mucho. Las ganas de encontrar algo nuevo siempre estuvieron, el ‘cómo’ hacerlo era en lo que dudaba. Cuando voy a esas charlas, me informo más, leo un poco más de metodología en la investigación y ya tenía más claro cómo hacerlo. Eso me animó a iniciar este este viaje que empieza en 2018”, narra Chambergo sobre los primeros momentos de su interés por investigar.
Su primer artículo nació como una carta al editor en la opinó sobre un tema muy concreto de su carrera. Lo hizo junto a un docente de la UCSUR.
“Mi primer artículo fue junto al doctor Fernando Runzer de la universidad. Fue una carta al editor opinando sobre el tema del cambio de punto de corte de hipertensión, porque el punto de corte de hipertensión aceptado es 140 sobre 90 y se proponía bajarlo a 130 sobre 80, entonces eso iba a tener un impacto en la epidemiología, sobre la medición poblacional de la presión alta y de los infartos”, comenta el estudiante de Medicina.
El sistema de Renacyt
Renacyt es el sistema del Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec) encargado de registrar -a nivel nacional- a personas naturales y jurídicas relacionadas con la ciencia, tecnología o innovación tecnológica (CTI) residentes tanto en el país como en el extranjero. Según su web, cuentan con un sistema de clasificación que divide a los investigadores adscritos en siete niveles y una categoría de Investigador Distinguido, en mérito a las contribuciones a la ciencia y al beneficio de la sociedad.
El Nivel II, con el que fue clasificado Diego, es una categoría en la que se reconoce a los científicos cuya producción científica se destaca por el adelanto de su especialidad, deben alcanzar al menos 100 puntos, recordar que para el nivel VII se requieren 10 puntos. Así, el estudiante de medicina se une al reducido grupo de 93 científicos peruanos que han logrado ese nivel de clasificación, sumado a los 30 de nivel I y 37 de nivel distinguido.
El nuevo reglamento de Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Concytec) para calificar investigadores considera por primera vez la posibilidad de registrar estudiantes de pregrado como investigadores. Los pocos alumnos seleccionados han sido clasificados en niveles VI o VII.
Proyecciones a futuro
Chambergo, quien planea especializarse en Cardiología, tiene 37 artículos en Scopus y más de 50 en total. En su corta pero fructífera carrera como investigador, el estudiante ha publicado sobre el COVID-19, la hipertensión, el cáncer, entre otros tópicos. En paralelo, se encuentra desarrollando más artículos científicos.
El futuro galeno considera que lo más importante para desarrollarse como médico, además de una buena organización, es tener claros sus objetivos. “Mi objetivo personal es cambiar las cosas para mejor (..) Eso creo que se puede hacer mediante muchas herramientas, una de las más importantes es la investigación; es decir, innovar y cambiar las cosas”, puntualiza.
El mundo de la investigación no es sencillo, requiere de tiempo, esfuerzo y motivación por conocer. Diego recomienda a futuros investigadores cultivarse en el hábito de la lectura y tener presente que lo negativo se puede transformar.
“Para comenzar en el mundo de la investigación hay que leer mucho, porque investigar no es repetir lo que ya se conoce, sino es encontrar lo que falta, los vacíos de conocimiento. Una vez que conocemos eso, allí entra a tallar el investigador”, dice Chambergo.
Adicionalmente, el conocimiento del idioma inglés es fundamental para el desarrollo como investigador. Según Elsevier, empresa de análisis de información global especializada en producción científica, el 92.1% de artículos sobre Ciencias de la Salud se encuentran en el idioma inglés. Esto representa una oportunidad para todos aquellos que dominan el idioma anglosajón, como es el caso de Diego.
Los logros que ha obtenido hasta el momento no hubieran sido posibles sin el apoyo de su familia. Chambergo señala que han sido fundamentales para su desarrollo en el ámbito académico y científico. “Desde el año 2018 en el que inicié la carrera, siempre he tenido el apoyo de mi papá y especialmente de mis abuelos. Ambos han sido un soporte emocional que siempre me ha entendido y un ejemplo en investigación en sus respectivas áreas”, señala orgulloso.
Diego espera que su experiencia anime a otros jóvenes a seguir el camino de la investigación y que tengan siempre presente que todo puedes ser un aprendizaje para crecer.
“Eso negativo [que nos sucede a todos] se puede transformar en algo motivador, y ello va ligado a tener clara la dirección de las cosas”, finaliza.